martes, 16 de abril de 2013

En los Acantilados de la Locura


Siempre acabo acudiendo a mi memoria de papel. Tarde o temprano vuelvo a ella. Y los Acantilados de la Locura del bueno de Will es un nombre demasiado bueno para relegarlo a un mero accidente geográfico.
¿Que se siente una vez asciendes a los Acantilados de la Locura?
Satisfacción y paz. Pero una satisfacción y una paz agridulces. Te has mirado a ti mismo. Desnudo. Sin ambages. Sinceramente. Y no todo es bueno. No todo te gusta.
¿Que obtienes?
Autoconocimiento.
Entonces comprendes que hay cicatrices que no se borran. Deseos que nunca se realizarán. Descubres que eres fuerte. Más fuerte de lo que creías. De lo que nunca nadie creyó. Pero no gritas: "¡Eh! ¡Mirad que fuerte que soy!" Te callas y miras al suelo porque el recuerdo de las pruebas superadas es doloroso. Comprendes cual es tu momento y cual es tu lugar. Sabes lo que quieres. Y por encima de todas las cosas sabes quien eres.

martes, 9 de abril de 2013

Pesando el corazón de un buey




«La libertad reside en saber quién eres en realidad». (Linda Thomson).


Me inspiré para escribir estas líneas escuchando Killing yourself to live de Black Sabbath. Quizá sería intersante que lo leyeras escuchando la misma canción. Así que al final pongo el enlace:

Soy una persona de extremos. No conozco los puntos intermedios. Siempre lo doy todo, para bien y para mal. No importa lo mucho o poco aconsejable que resulte alguna cosa. Soy un Karamázov de pies a cabeza, tanto como Iván, Mitia o Aliosha. Mi alma es karamazoviana y mi filosofía también. Si es para bien siempre que sea lo más arriba que se pueda llegar. Si es para mal que sea en la sima más profunda del Erebo. Soy capaz de abrir mi pecho con un cuchillo y sacarme el corazón. Pesarlo si queréis. Ponerlo en una balanza y compararlo con una pluma. Las cartas sobre la mesa. Así que cuando muera quiero una lápida sin nombre donde unicamente diga que allí yace un Karamázov.


http://www.youtube.com/watch?v=6PV1tlEm2uI



lunes, 1 de abril de 2013

Eunoe

Ahora que las aguas de Eunoe cubren mi carne en un balsámico baño es hora de hacer un acto de introspección y respirar hondo antes de continuar hacia adelante. ¿Qué es la vida? Responder esta pregunta es un acto de violencia hacia la misma. Es un intento por imponer un caprichoso significado a algo que sencillamente es inefable. La vida solamente puede ser vivida y lo único que sabemos de ella es que está en movimiento. Aquello que está muerto es aquello que está quieto